Una semana después de derrotar al Real Unión de Irún y volver a reengancharse a la lucha por la permanencia, la Gimnástica Segoviana viaja hasta el estadio de Mendizorroza, donde le espera un Deportivo Alavés necesitado de puntos para continuar en su lucha particular por acceder a una de las cuatro primeras posiciones, y que aún no ha podido sumar dos victorias consecutivas en toda la temporada. Teniendo en cuenta que el pasado fin de semana el conjunto alavesista ganó en Zamora, bueno sería que mantuviera la misma tónica de toda la campaña, ya que ello significaría que la Segoviana habría podido sumar puntos en uno de los desplazamientos más complicados que le restan por hacer al conjunto que dirige Paco Maroto.
Sabedor de que lo que ahora se necesitan más que nunca son puntos, el técnico de la Segoviana había preparado una pequeña “sorpresa” para su oponente, con la inclusión de Dani Palacios junto a Chema y Pablo en el centro de la defensa, y dejando a Pino en el banquillo, con lo que el equipo gimnástico fortificaría su parcela defensiva esperando aguantar el empate todo lo posible, y que el paso de los minutos fuera llevando los nervios a un Alavés que en su feudo no pasa por ser precisamente el equipo más fuerte de la categoría después de haber cedido seis empates en trece partidos.
Sin embargo, en el entrenamiento del pasado jueves la lesión de Víctor Pérez dio al traste con los planes del técnico, ya que parece un riesgo hacer jugar a Rubén en el lateral zurdo cuando apenas ha jugado un par de partidos en esa posición, y tampoco parece como la mejor vista por el técnico la opción de mantener a Palacios en el lateral, e incluir a Alex como tercer central, habida cuenta de que el jugador no participa con el equipo desde hace muchos meses. De esta manera, entra dentro de lo posible que la Segoviana vuelva a su dibujo habitual con cuatro zagueros y Roberto por delante, otros cuatro centrocampistas con Fran y Cajoto abiertos a las bandas, más Anel y Roberto llegando en segunda línea, y Pino buscándose las habichuelas en la punta del ataque, tratando de aprovechar la baja del central Luis Prieto, expulsado en el partido de la pasada jornada frente al Zamora.
La Segoviana pasa por ser el segundo peor equipo de la categoría jugando como visitante, después de sumar 6 puntos de 36 puestos en juego, sólo “superado” por el Lemona, que ha pasado a ocupar el farolillo rojo de la clasificación, puesto que el Burgos logró sumar tres puntos después de derrotar al Athletic B por 1-0 en el encuentro aplazado en su día por la nieve y que se disputó a mediados de la presente semana. De esta manera, el conjunto burgalés se ha colocado a seis puntos de la Segoviana, y a nueve del puesto de promoción. Una distancia complicada de remontar, pero en absoluto imposible mientras continúe habiendo puntos en juego. Y si el equipo de Burgos todavía confía en el milagro de la permanencia, ¿por qué la Segoviana no ha de creer?
