El Teatro Juan Bravo cierra hoy sábado su programación del mes de marzo con un espectáculo de danza, “Las criaturas de Prometeo”, una producción de la compañía Plan B basada en el mito griego y en la música creada por Beethoven en 1801. Será a partir de las ocho y media de la tarde, con las localidades al precio único de 15 euros.
Esta propuesta, que reúne sobre el escenario a once bailarines, en un espectáculo concebido en dos actos. El primero “de lo divino” ,sobre el mito del titán que creó la humanidad y que fue castigado por los dioses, a que su hígado fuera devorado por un águila cada noche, por robar el fuego divino y entregarlo a los humanos. El segundo “de lo humano”, es una reflexión a partir de la dualidad del ser y la inconformidad que siente frente a su contexto, con un ansia obsesiva por encontrar su identidad. La perdida del dios, el abandono, el reencuentro para volver a avanzar y el ritual del fuego como final o comienzo perpetuo del ciclo.
En 1801, Salvatore Vigano, profesor de ballet en Viena, escogió un tema de inspiración helenística para la creación de un nuevo espectáculo, “Las criaturas de Prometeo”, y pidió a Ludwig van Beethoven que compusiera la música. Para ellos, Prometeo no es sólo el titán que roba el fuego a los Dioses para dárselo a los hombres. También es el padre de una nueva humanidad que eleva a las personas mediante el arte y el conocimiento.
Fiel a esta visión, el ballet presenta a dos criaturas de barro que, gracias al poder de la armonía, cobraron conciencia de su propia existencia. En esta época, el mundo antiguo se presenta como ideal perdido de conocimientos y libertad, que hace sentir nostalgia del jardín de las delicias aunque, tras la caída, Adán y Eva no se volvieran contra Dios. Según la filosofía de las Luces, el Hombre debe consolidar su poder de creación, su parte de divinidad, aceptando ser mortal pero ignorante a los Dioses porque ya nada pueden hacer por él.