Un gol de Xavi Hernández a cuatro minutos del final permitió al Barcelona llevarse la victoria ante el Granada, en un partido que ofreció la versión más gris del conjunto ‘culé’, minimizado de cara a portería por el acierto de Toño, el portero visitante, y los espacios generados en su improvisada defensa, que a punto estuvieron de costarle el triunfo. Los azulgrana lograron, de esta forma, su quinto triunfo consecutivo en Liga, lo que les sitúa con 15 puntos en lo más alto de la tabla y dejan la diferencia con el Madrid, que juega hoy ante el Rayo Vallecano, en 11.
Estuvieron cerca de saltar las alarmas en ‘Can Barça’ por la tozudez nazarí y por la excelente actuación de su guardameta. El equipo de Vilanova buscó el gol sin rémoras y los de Anquela, con argumentos numantinos, se hicieron amigos del reloj para soñar con lograr algún punto.
Sin embargo, Xavi enganchó un rechace al borde del área y la pegó a la misma escuadra, el único sitio al que no llegaba Toño. El de Terrasa desatascó un partido que se había vuelto canalla para los ‘culés’. De hecho, Orellana tuvo un mano a mano clarísimo que estrelló en el pecho de Víctor Valdés.
Se pasó del posible 0-1 al 1-0 en un abrir y cerrar de ojos. El Granada no se lo podía creer, había tenido en la palma de su mano los titulares de hoy. Pero no, no pudo ser. El Barça demostró que su falta de brillantez fue más mérito del rival que de su escasa claridad con el balón.
Villa, titular por primera vez tras su lesión, buscó reencontrar sensaciones en un partido algo feo para él, pero la fortaleza visitante impidió la habitual lucidez ‘culé’.
Pasó la primera parte, llegó la segunda y la falta de espacios seguía matando a los de Vilanova. Nyom, que firmó un encomiable ejercicio físico y El Arabi, que aportó frescura, fueron lo mejor del cuadro andaluz.
Sin embargo, el desenlace acabó condenando con fiereza al Granada. Xavi, actor de reparto ayer, enseñó los galones para dejar los puntos en casa. A falta de dos minutos para el final, una jugada de Messi acabó en los pies de Borja Gómez, que no pudo evitar introducirse el balón en su portería que puso el definitivo 2-0.
Por otro lado, horas antes del partido, el Barcelona celebró su asamblea general ordinaria de 2012 en la que el presidente Sandro Rosell, insistió en la importancia de respetar «la historia». «Siempre defenderemos el derecho de los pueblos a decidir su futuro. Siempre nos hemos abierto al mundo, pero queremos que nos entiendan y nos acepten tal como somos, catalanes», indicó.
Además, en el encuentro de socios, los compromisarios decidieron someter a referéndum entre los abonados del club la construcción de un nuevo estadio. Según los estudios que presentó la Junta Directiva, el proyecto de un campo nuevo le costaría a las arcas ‘culés’ unos 600 millones de euros, mientras que remodelar el actual estadio azulgrana dejaría el gasto en, aproximadamente, la mitad.
