El operativo de la Junta de Castilla y León ha extinguido el 75 por ciento de los incendios registrados este año en la provincia antes de que alcanzaran una hectárea de superficie. El 60 por ciento de los fuegos ha sido sofocado en menos de tres horas.
En un año especialmente complicado por las altas temperaturas y la falta de precipitaciones, la provincia de Segovia ha sumado un total de 91 incendios forestales, de los que 65 fueron conatos, es decir, fueron apagados gracias a la rápida respuesta de los medios extinción antes de alcanzar la hectárea de superficie.
Fue preciso declarar el nivel 1 de emergencia en cuatro fuegos registrados en los meses de julio y agosto en Fuente el Olmo de Iscar, Sangarcía, Lastras de Cuéllar y Hontalbilla. La rápida respuesta del operativo y la movilización de medios de extinción (hasta 41 medios se desplazaron a Lastras de Cuéllar) evitaron en los cuatro incendios que se llegara a las cien hectáreas de superficie. El mayor de todos ellos fue el incendio de Hontalbilla, que afectó a 81 hectáreas de terreno.
Este año ha sido especialmente complicado, dada la extremada sequía del pasado invierno —según la AEMET, uno de los más secos de los últimos 70 años— y las escasas precipitaciones en la primera mitad del año. Esto ha propiciado una gran desecación del combustible forestal y el suelo, y por tanto una gran inflamabilidad. La probabilidad de ignición debido a la falta de humedad y altas temperaturas ha sido sensiblemente mayor que en el año anterior. Además, el verano registró precipitaciones muy inferiores a la media, con temperaturas muy altas y con varias olas de calor asociadas a la presencia en altura de masas de aire cálido procedente del Sáhara.
Se ha observado que la siniestralidad ha resultado ser especialmente alta durante el primer trimestre del año. A 31 de marzo ya se habían producido 25 incendios, frente a los siete que se registraron de media en el mismo periodo en los últimos diez años en la provincia.
Esta humedad relativa de la atmósfera y del combustible muy inferior a la media y el calor han elevado el número de incendios causados por motores y maquinaria, lo que ha contribuido a incrementar hasta 102 el número de incendios debidos a negligencias y accidentes en la provincia este año. Este tipo de siniestros asociados a los trabajos en el campo se podría evitar si se extremaran las medidas de seguridad. Sin embargo, el operativo de extinción ha respondido con eficacia.
