De Segovia a la ermita de San Frutos, en las Hoces del río Duratón hay… 67 mojones. Por todos estos hitos pasarán quienes participen en la peregrinación a pie en cuatro etapas que, organizada por EL ADELANTADO y con el patrocinio de la Obra Social y Cultural de Caja Segovia, comenzará hoy, en la Catedral, tras la bendición del itinerario por parte del obispo de Segovia, Ángel Rubio, a las 09,00.
Acabado ese acto institucional, los peregrinos iniciarán la primera etapa, de cerca de 22,5 kilómetros, con final en Santo Domingo de Pirón, donde está prevista una comida popular, después de la cual se trasladará a todo el grupo en autobús hasta la ciudad Segovia.
Mañana domingo será la segunda etapa, entre Santo Domingo de Pirón y Orejanilla, de 25 kilómetros. Los interesados en participar pueden inscribirse, a lo largo de la jornada de hoy, en las páginas web eladelantado.com o caminodesanfrutos.org. El precio de la inscripción es de 12 euros, que incluye un regalo al inicio de la etapa, avituallamiento durante el mismo (agua y fruta), comida y transporte en autobús.
Los asistentes a esta segunda etapa deberán presentarse, a las 08,30 horas, en la Plaza Oriental de Segovia, para subir al autobús que les llevará a Santo Domingo de Pirón, punto de partida de la ruta.
Itinerario de mañana
Allí, en la misma Plaza Mayor, los senderistas tomarán el ‘Camino de San Frutos’, pasando por un tramo en el que se disfruta el típico paisaje del piedemonte serrano, hasta llegar al pueblo de Pelayos del Arroyo, cuya Plaza Mayor también se visita.
Tras ascender una pequeña loma, los senderistas se dirigirán a Torre Val de San Pedro, atravesando dos de sus núcleos, la Torre y el Valle. Desde este último, dejando a la derecha la abandonada ‘tejera de Ramón’ se va ganando altura hasta llegar a un punto donde se domina el valle del Cega. En el fondo del mismo, los caminantes cruzarán un rústico puente sobre el Cega y, un poco más adelante, otro para salvar el Ceguilla. A continuación, una nueva ascensión, áspera por la vegetación arbustiva. Y, casi sin darse cuenta, los peregrinos se encontrarán en El Guijo, frente a la amurallada Pedraza de la Sierra. Entonces tocará bajar por el monte y ascender por la misma senda que llevan los novillos durante el encierro de septiembre, para dejar después a la izquierda la subida a la villa y dirigirse hacia el ‘Centro de Interpretación del Águila Imperial’, que también queda a la izquierda. El último tramo de la etapa, entre Pedraza y Orejanilla, cruza bajo un acueducto y atraviesa bellísimos parajes, poco frecuentados por el hombre.
Ya en Orejanilla, está programada otra comida popular y, a continuación, el consabido viaje de regreso en autobús a Segovia.
