El Viveros Herol Nava está comenzando a pelear contra los elementos. Más allá de que el rival se encuentre en mejor o peor forma, e incluso más allá de que las decisiones arbitrales sean o no favorables en los momentos decisivos de los partidos (que no lo son), el conjunto segoviano se ha metido en un más que buen problema de bajas por lesión en la primera línea, y este hecho le terminó pasando factura ante el Tubos Aranda en un derbi que decidió la pareja arbitral con una exclusión a Bonanno en el minuto 42 cuando el argentino estaba siendo diferencial en el partido, y el portero ribereño Pau Guitart que con sus intervenciones, y sus tres goles, acabó por ser decisivo.

Los dos equipos apostaron por correr en los primeros minutos de partido, con suerte desigual puesto que el número de pérdidas fue demasiado grande, por parte visitante por la búsqueda infructuosa hacia la zona del pivote, y por el bando local por las imprecisiones en los pases a la hora de correr el contragolpe.
El paso de los minutos fue calmando el partido y asentando a las defensas, aunque el Tubos Aranda siempre amenazó con el contragol que le dio buen resultado en momentos puntuales, permitiéndole liderar el marcador, con ventajas de uno y dos goles.
El Viveros Herol Nava, con las ausencias de sus dos laterales derechos, Luis Jiménez e Isaías Guardiola, hizo la apuesta de repartir mucho los minutos con los hombres que le quedaban de primera línea incluyendo en la rotación a Alfredo Otero. Pero el centro de la zaga visitante, con Fischer y Saiz, permitía pocas alegrías, y por ello los locales no terminaban de encontrar los espacios en la defensa arandina.
El problema llegó cuando lo hicieron, porque Pau Guitart tardó poco en comenzar a mostrar su calidad bajo los palos, sumando nueve intervenciones en el primer tiempo, incluyendo dos paradas a lanzamientos desde los siete metros. De nuevo el Viveros Herol se estrellaba ante un portero en lanzamientos claros y con ventaja, un hecho que sin duda podía afectar a la suerte del partido.
PORTEROS DE CALIDAD
Afortunadamente para el conjunto segoviano, en la otra portería Luis de Vega no le iba a la zaga, sumando el mismo número de intervenciones positivas. Pero Nava, que perdió a Nolasco lesionado tras sufrir un fuerte golpe en la rodilla tras un choque con Mosquera, se fue poco a poco atascando en ataque. Tanto fue así que en los últimos siete minutos antes del descanso sólo fue capaz de anotar un gol. El Tubos Aranda aprovechó el momento para marcharse a los vestuarios con ventaja (11-13).

El reinicio del encuentro fue bastante más favorable al conjunto local. Álvaro Senovilla metió a Matheus Buda en la portería, y sorprendió colocando a Nico Bonanno en ataque. Estas dos decisiones cogieron con el pie cambiado al Tubos Aranda, que tardó pocos minutos en perder su ventaja, tras recibir un parcial de 4-0 que puso al Balonmano Nava al frente del partido y con unas sensaciones más que positivas pese a que algunos errores puntuales llevaron a que los dos goles de diferencia no se vieran aumentados.
El guardameta visitante Pau Guitart fue decisivo con sus intervenciones y los tres goles que marcó desde su portería
Sin embargo, una roja muy protestada al jugador argentino mediado el segundo tiempo vino a cambiar de nuevo el signo del partido. El equipo visitante, que en cuanto podía apostaba por correr porque en el ataque estático se encontraba con no pocos problemas, vio el cielo abierto sin Bonanno, porque Nava ya no pudo defender con tanta intensidad, y en ataque ya sólo le quedaban Borja, Nevado y Tioumentsev para aguantar todo lo que quedaba de segundo tiempo ya que a Otero habían tardado poco en cogerle la matrícula los defensores visitantes.
EL CANSANCIO DEL FINAL
Pese a ello, aguantó el cuadro local con Buda y De Vega sujetando en la portería, pero sumando cada vez más errores en ataque. Una contra que acababa con un mal pase, una falta en ataque de las ‘raras’… y al final el Tubos Aranda logró ponerse por delante y marcar una renta de dos goles porque en defensa podían emplearse con bastante más contundencia de lo que podía hacer el Viveros Herol en la defensa de su área.

Pese a todo, la gestión de la ventaja por parte visitante fue bastante mejorable, y el conjunto segoviano una opción de llegar a los últimos segundos con el marcador empatado. Pero Guitart le cerró la puerta a Dani Pérez y firmó la sentencia para un Balonmano Nava al que las bajas le están empezando a pasar factura.
