El Comité de Competición, reunido ayer, decidió sancionar con 10 partidos de suspensión al central del Real Madrid Pepe por su comportamiento en el encuentro del pasado martes contra el Getafe, cuando propinó dos patadas a Javier Casquero, quien estaba tendido en el suelo después de ser objeto de un penalti. Posteriormente, dio un puñetazo a Juan Ángel Albín y se marchó del campo insultando a los árbitros.
Según desgranó Alfredo Flórez, presidente del organismo, al brasileño nacionalizado portugués se le impone un encuentro de penalización por la pena máxima, cuatro por cada una de las dos agresiones y uno más por insultar a los colegiados. No se le castigó por salir al césped, una vez expulsado, para celebrar el triunfo de su equipo en el tiempo de descuento.
A la hora de determinar el castigo, se tuvo en cuenta a favor del zaguero que no hubo «resultado lesivo», pero no existió ningún otro atenuante, como por ejemplo provocación, arrepentimiento espontáneo o falta de antecedentes, ya que al futbolista se le había sancionado con anterioridad incluso esta campaña.
De esta forma, Pepe se despide del actual ejercicio, y también se perderá las cuatro jornadas iniciales de la próxima campaña.
No todo fueron malas noticias para el Real Madrid, ya que, gracias a su recurso, Competición dejó sin efecto la tarjeta amarilla que se le mostró a Gonzalo Higuaín en el duelo ante los hombres de Víctor Muñoz, por considerarse que había simulado un penalti. Habría supuesto la quinta del ciclo, y su baja para el partido de mañana contra el Sevilla.
El Comité se la retiró después de un «meticuloso visionado» de las imágenes, en las que se aprecia que «el jugador contrario provoca su caída». Así, Juande Ramos podrá disponer del argentino en el Sánchez Pizjuán, lo que alivia en parte los problemas del preparador en la línea de ataque tras la lesión de Arjen Robben.
Por otro lado, el organismo no entró a valorar la actitud de Marcelo, que se burló del ‘Cata’ Díaz al final del compromiso.
En otro orden de cosas, el Real Madrid se ejercitó ayer de nuevo para preparar lo mejor posible el decisivo partido ante el Sevilla.
Continúa resultando dudosa la presencia del delantero holandés Klass Jan Huntelaar, que volvió a trabajar en solitario debido a unas molestias en el aductor.
El preparador de la plantilla ya sabe que se verá obligado a prescindir en la contienda del holandés Wesley Sneijder, y el defensa argentino Gabriel Heinze quizá no esté en condiciones tampoco.
Para colmo, en una sesión en la que el balón fue el protagonista, el italiano Fabio Cannavaro dio un susto, al quedarse tumbado en el césped unos instantes después de sufrir un golpe en el tobillo izquierdo, tras un choque con el joven Royston Drenthe. No obstante, minutos más tarde se reincorporó al entrenamiento.
