Rajoy sale reforzado de la moción frente a un Iglesias que pierde fuerza

Críticas. El secretario general de Podemos presenta su candidatura a liderar el Ejecutivo centrando sus intervenciones iniciales en reprobar los casos de corrupción del PP. Letal. El presidente del Gobierno defiende que Iglesias no es merecedor de sustituirle en La Moncloa porque sería perjudicial para el bienestar y la estabilidad de España

El presidente del Gobierno y del PP, Mariano Rajoy, acusó ayer a Podemos de “pintar a España de negro” y presentar un “cuadro tenebroso” del país porque ese partido, que nació hace cuatro años para “sacar partido de la insatisfacción” de la crisis, “necesita las malas noticias como el comer”. Además, afirmó rotundo que son “falsas” las acusaciones de corrupción esgrimidas por el partido morado y recalcó que los miembros de su Ejecutivo “no son corruptos”.

Sin esperar a que el líder de Podemos, Pablo Iglesias, subiera a la tribuna a exponer su programa de Gobierno, Rajoy tomó la palabra para arremeter contra el “farragoso” discurso de la portavoz parlamentaria de Unidos Podemos, Irene Montero, y subrayar que no hay razón para una moción de censura “ni en el fondo ni en la forma”. Incluso llegó a calificar esta iniciativa de “pintoresca y chusca”.

Al inicio de su intervención, Rajoy ironizó con que cuando Podemos decidió presentar la moción ni siquiera contaban con un candidato. “¿Para qué inquietarse por los detalles cuando la única y principal pretensión era dar el espectáculo? Lo dejaron para el final. Qué más les daba, si no pensaban que pudiera salir adelante? Para perder, cualquier candidato vale, incluso usted, señor Iglesias Turrión”, exclamó el jefe del Ejecutivo.